

El Sr. Patxi López no anduvo fino, y los periodistas de EL MUNDO, que para eso están, afilaron los cuchillos. Sr.López: El reconocimiento de una mentira -al margen de sus consideraciones personales sobre la honestidad- por parte de un político en activo, representa, en países democráticamente consolidados, como el Reino Unido o USA, la automática dimisión del embustero. Quiero recordar que no se alzaron demasiadas voces desde la oposición, pidiendo la dimisión de D. José Luis a raíz de sus desafortunadas declaraciones sobre los contactos con ETA tras el atentado de la T4. Y solo se me ocurre un motivo: Probablemente guarden en sus carteras el mismo número de engaños que sus rivales políticos.
Es triste la independencia de Kosovo. De un lado da alas a los nacionalismos; de otro nos aleja de la idea de una Europa verdaderamente unida. El reconocimiento de este estado abre una herida en la UE -por eso se ve lógicamente apoyado desde USA- de la que tardará en recuperarse; no quiero ser agorero, pero además de los porpios habitantes de la zona, las bolsas europeas, la violencia y la desestabilización venideras, van a pasar factura a nuestro modo de vida. Ojalá me equivoque.
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