miércoles, 28 de noviembre de 2007

Medité y...

Y me dije: El Sr. Rodríguez Zapatero quiere establecer un nuevo pacto con el planeta, según leímos en la prensa de hoy. El Sr. Rodríguez Zapatero desestimó la posibilidad del famoso plan hidrológico nacional por motivos, desde mi punto de vista, estrictamente políticos. El Sr. Rodríguez Zapatero prometió, a cambio, la construcción de numerosas plantas desalinizadoras, que no se ha llevado a efecto.
Al margen de la idoneidad del dichoso plan, lo evidente y científicamente contrastado, es la capacidad de contaminación de las plantas desalinizadoras. Independientemente de cual fuese el reparto del agua, parece más lógico canalizarla en tierra firme que no permitir su salida al Mediterráneo para desalinizarla a continuación, a un precio elevadísimo, tanto desde el punto de vista económico como ambiental.
Por otro lado España fue de los países más contaminantes de la Unión Europea en 2.005, año en que estuvimos gobernados por Don José Luis.
No se trata esto de "atizar" al gobierno porque crea o desee un triunfo de la actual oposición; en absoluto. El Sr. Rajoy hizo tristemente famosa la frase de los "hilillos de plastilina" en la tragedia del Prestige; creo que fue el Sr. Lluch el del "bichito" cuando un fenómeno, aún desconocido actualmente, envió a mejor vida a unos cuantos cientos de compatriotas; en fin, que nuestros próceres ene sta España singular, han tenido momentos de franco desacierto en sus manifestaciones. Criticarlos desde la cordialidad -y a veces el sarcasmo- me parece positivo, pero siempre que la crítica se dirija a quienes se hagan merecedores de ella sin importar el color político que defiendan y que en mi opinión, a veces no coincide con el que sienten en su corazón.

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