Hoy le toca la colleja a EL PAIS, a quien sería aplicable una de esas clásicas lecciones de ética periodísitca del extinto CQC. Efectivamente, publican ambos la misma noticia:
EL MUNDO: El Gobierno convoca a las TV para pactar el tratamiento de la violencia doméstica
EL PAIS: El Gobierno llama a capítulo a las televisiones por la violencia machista
Desde luego, he de quedarme con la primera lectura; la reciente tragedia sucedida inmediatamente después de un "reality show" en el que fue rechazado el presunto asesino, aconseja que las televisiones hagan una más minuciosa selección de los personajes que vayan a intervenir en este tipo de programas. Desde luego que Dª Patricia no es culpable del asesinato, pero lo más obvio y estremecedor, es que no es lo mismo ser rechazado en una entrevista privada que ante dos millones y medio de personas. Por lo tanto, el tipo de tratamiento que se de a estos programas se debería pactar entre el gobierno y las diferentes cadenas televisivas.
De la lectura de EL PAIS puede desprenderse que el gobierno intervendrá en el contenido de las emisiones por la violencia machista (que peligro, a ver quien decide lo que es violento y lo que no) y centra en el machismo la responsabilidad de dicha violencia. Si bien es cierto que en la mayor parte de los casos los maltratadores son hombres (y por tanto, maltratadas las mujeres), existen casos a la inversa, sobre los que parece que el gobierno no va a intervenir (¡¡¡!!!¿¿¿???). Por estas confusas interpretaciones es por lo que este titular parece más propio de la prensa sensacionalista que de un periódico serio, plural e independiente.
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