IU gobierna con ANV en Mondragón. La alcaldesa, que como es obvio se niega a condenar los crímenes cometidos por sus correligionarios, cede el puesto a la marca en el País Vasco de IU, EB, para que celebre los funerales.
Editorial
LOS INFAMANTES PACTOS DE IU
Gaspar Llamazares ha venido denunciando que el bipartidismo de la campaña dejaba a su formación en desigualdad de condiciones para competir como tercera fuerza política de ámbito nacional. Después de conocer la actitud de EB -marca de IU en el País Vasco- en Mondragón y la insuficiente respuesta del coordinador general, puede que este perfil bajo haya sido lo mejor para no perder más votos. El asesinato de Isaías Carrasco ha sacado a la luz el infamante pacto de gobierno que EB mantienen con ANV en el Ayuntamiento.
De hecho, un concejal de la formación liderada por Llamazares preside la corporación durante los días de luto, ya que la alcaldesa proetarra se negó a condenar el atentado y a que la capilla ardiente se instalara en el Ayuntamiento. IU mantiene una posición de teórica firmeza contra ETA, por lo que era de esperar que, después de la negativa de ANV a condenar el asesinato del político socialista, los concejales de este ayuntamiento rompieran con quien ampara los crímenes. Tras la confusión inicial, puesto que un sector de EB no quería la ruptura, el lunes está convocada una asamblea que teóricamente retirará el apoyo a la alcaldesa. Sin embargo, EB permite que ANV gobierne en otros ayuntamientos del País Vasco y sus responsables se han llamado andana cuando han sido requeridos para responder qué harán a partir de ahora. Llamazares hizo un papelón primero al decir que la alcaldesa había dimitido por no condenar la violencia, y después al guardar silencio ante el pacto de algunos de los suyos con los proetarras. Si quiere que se le siga respetando como líder de la tercera fuerza política, Llamazares está obligado a exigir a sus compañeros vascos la ruptura con ANV en todos los ayuntamientos. Y si se negaran, es él quien tiene que romper con EB.
Pero lo malo, lo paradójico, es que ANV llegó a ocupar cargos públicos por la permisividad del PSOE, en tratos con la banda terrorista. De ese modo, el terror se nutre económicamente de los impuestos de los españoles, gobierna en coalición con otros partidos y dispone de información privilegiada para tirotear a los demócratas. ¿La culpa es también del PP?.
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